«No es un tarifazo ni un aumento desmedido», aseguró el subsecretario de Hidrocarburos en el marco de la implementación de el nuevo esquema de subsidios energéticos.
Federico Bernal, subsecretario de Hidrocarburos, habló sobre la quita de subsidios que se realizará durante la aplicación de la segmentación energética e hizo foco en el propósito de un «uso eficiente de recursos».
«No es un tarifazo, no es un aumento desmedido y todo va a depender de si un cliente empieza a mirar su medidor», consideró en declaraciones radiales.
También señaló que «es la primera vez que se hace en la Argentina, porque implica una política de segmentación para un nuevo orden o reordenamiento tarifario y, a la vez, permite hacer un ahorro y un uso eficiente de los recursos», y explicó que «sobre la misma área de licencia, se dividen subzonas con particularidades climáticas, que a su vez tienen distintos umbrales sobre las que se mueven distintos tipos de usuarios».
Sobre los nuevos montos que deberán pagar los usuarios que pierdan los subsidios, adelantó que una factura promedio de gas de $1.650 de junio último, en septiembre va a empezar a pagar $115 más, en noviembre $160 y en enero $221.
En cuanto al menor consumo dentro del territorio nacional reveló que esto se da en Tucumán, en donde se alcanza un tope de 400 metros cúbicos, mientras que en el polo opuesto se sitúa Tierra del Fuego con 4.000 metros cúbicos, 10 veces más.
Para cerrar, aclaró: «Jamás me opuse a un uso eficiente del recurso ni de los subsidios. A la quita de subsidios tampoco, siempre y cuando éstos tengan un uso eficiente. Estamos todos de acuerdo con la quita».
