Marta Yañez habló con los familiares de los tripulantes para tranquilizarlos sobre el rumbo de la investigación.
La jueza federal de Caleta Olivia, Marta Yañez, aseguró que la causa por la desaparición del ARA San Juan “no está dormida” y le pidió tranquilidad a los familiares de los 44 tripulantes.
A cuatro meses de la última comunicación con tierra, Yañez aseveró ante los familiares que no responde “ni a la Armada ni al Presidente”.
Uno de los inconvenientes es que el juzgado tiene todas las comunicaciones del ARA San Juan con la base naval, pero las mismas están cifradas. “Acá van a venir todos los que tienen que descifrar”, sostuvo la jueza.
En los últimos días, la magistrada citó a declarar a siete submarinistas, dos ex comandantes y un contraalmirante de la Armada para determinar el estado general de la nave antes de perderse en aguas argentinas.
La ronda de testimoniales comenzará el lunes próximo con la declaración del contraalmirante Osvaldo Vernazza, quien deberá aclarar si la embarcación intentó establecer contacto luego de la explosión detectada a las 10:31 del 15 de noviembre.
La anotación de cuatro comunicaciones fallidas y presuntamente mal anotadas, despertó la sospecha de los familiares de los tripulantes. Ellos habían pedido la declaración del suboficial Rubén Espínola, supervisor de comunicaciones de la Base Naval Mar del Plata, y su par de Puerto Belgrano, Valeria Noemí Carranza, pero la jueza optó por Vernazza.
Por otra parte, entre el 22 y el 26 de marzo declararán los siete submarinistas que no formaron parte del último viaje del ARA San Juan. Deberán responder las preguntas de Yañez sobre el estado general de la nave y si había sufrido fallas graves durante viajes anteriores.
Para la primera semana de abril, la jueza citó a los ex comandantes del ARA San Juan, a los capitanes de navío Ernesto Blanco y Eduardo Yrigoyen, quienes también deberán aportar datos sobre el mantenimientos y las capacidades operativas de la nave.