Macri tuvo una sugestiva reunión con el embajador de Colombia en el país; Gladys Cabezas se lanza a la política “en nombre” de su hermano José Luis.
Por Jaime Rosemberg para La Nación.
Un almuerzo entre dos viejos amigos. Así califican desde la Casa Rosada el largo y reciente encuentro que tuvieron, sin testigos y en la quinta de Olivos, el presidente Alberto Fernández y su excompañero de gabinete kirchnerista Aníbal Fernández. “Se juntan seguido, son amigos, y Aníbal es un excelente funcionario de este gobierno”, contaron cerca del Presidente, con relación al actual interventor de Yacimientos Río Turbio, que se encargó personalmente de desmentir que durante la reunión se hubiera analizado su retorno a la primera plana del Gobierno. “Ni yo fui a pedir nada ni me ofrecieron nada”, contestó Aníbal Fernández a LA NACION.
De todos modos, el vínculo del exjefe de Gabinete de Cristina Kirchner con el actual ocupante de ese puesto, Santiago Cafiero, no es del todo fluido y tiene al PJ de Corrientes como motivo de disenso. Sucede que, meses atrás, el empresario y dirigente Rodolfo Martínez Llanos tentó a Aníbal Fernández con ocupar la intervención del peronismo correntino, dividido y con escasas chances de derrotar al actual gobernador, el radical Gustavo Valdés, en las elecciones del próximo 29 de agosto. “Hablen con Alberto”, le contestó Aníbal y, ante la consulta del empresario con Cafiero, este habría contestado que ese puesto sería para otro dirigente, “porque a Aníbal va a otro lugar más importante”.
Lo que pasó después es conocido: luego de un período breve como delegado y mediador entre las distintas facciones del dirigente local Julio Sotelo, quien asumió la intervención del PJ Corrientes fue el intendente de Hurlingham, Juanchi Zabaleta, aunque las divisiones y discusiones no se terminaron con su llegada. De hecho, un sector de la oposición a Valdés presentó una demanda judicial, rechazada ya por la Cámara en la Contencioso Administrativo, para que se declare nulo el llamado a elecciones, en una jugada que en el oficialismo correntino leen como un intento de “embarrar la cancha” y retrasar lo inevitable: que Valdés consiga su reelección y extienda la hegemonía radical en la provincia mesopotámica.
Mientras intenta que la demanda prospere a tiempo en la Corte provincial, el PJ define por estas horas si el senador Carlos “Camau” Espínola o el exintendente de la Capital Fabián Ríos le disputarán la gobernación a Valdés, que, más allá de una relación tensa con su antecesor Ricardo Colombi, parece tener ordenado su patio interno de cara a la elección.
“¿Van a perder? Y bueno, que le vayan a preguntar a Cafiero”, dijeron cerca de Aníbal Fernández, que estaba dispuesto a asumir ese compromiso si contaba con el aval de la Casa Rosada. Un aval que nunca llegó.
Macri tuvo una sugestiva reunión con el embajador de Colombia
Mauricio Macri no descansa. Entre sus reuniones con la cúpula de Juntos por el Cambio para consensuar la propuesta electoral y su viaje a Madrid para presentar su libro, Primer tiempo, el expresidente se hizo un rato para recibir a un sugestivo visitante: el embajador de Colombia en el país, Álvaro Pava Camelo, quien semanas atrás criticó al Gobierno por su “intromisión” en el conflicto interno que vive ese país y que tiene en jaque al gobierno de Iván Duque.
De uno y el otro lado intentaron bajarle el tono a la importancia del encuentro y afirmaron que fue “breve y social”, ya que ambos se conocen desde que Pava Camelo inició su actividad diplomática en el país, durante el gobierno de Cambiemos. De todos modos, la fluida relación de la Casa Rosada y el kirchnerismo con el régimen venezolano de Nicolás Maduro habría sido uno de los ejes centrales del diálogo entre el embajador y Macri, que tiene en el expresidente Álvaro Uribe como uno de sus mejores amigos en Colombia.
en la arena electoral “en nombre” de su hermano
Su nombre se hizo conocido en aquellos dramáticos días de enero de 1997, cuando su hermano José Luis, fotógrafo de la revista Noticias, fue asesinado por custodios del empresario Alfredo Yabrán. Un cuarto de siglo después de esa muerte que conmovió al país, a Gladys Cabezas le picó el bichito de la política, incorporada al Partido Federal, que en la provincia de Buenos Aires encabeza Miguel Saredi.
“Está muy entusiasmada”, afirma Saredi, concejal de La Matanza y candidato a intendente allí por Cambiemos en 2015. La semana que pasó, Saredi y Cabezas recorrieron la escuela en la que estudió la ahora precandidata a diputada, en Avellaneda. Más allá de las preguntas de rigor por su hermano y su asesinato, Cabezas repite la idea de representar a los “invisibles”, sectores económicos y sociales marginados por el kirchnerismo. ¿Alianza con Randazzo? “Están lejos del Gobierno en campaña, después se acercan”, dicen en el partido, que también integra el histórico del PJ Julio Bárbaro.