La Junta Interventora se ha propuesto desconocer la autoridad de la Asamblea y ha convertido un “paper” a la FIFA en un “hecho consumado”.
Cuatro días después de que la Asamblea se autoconvocara en el último y desesperado intento por reinstitucionalizar a la AFA, el residual de la Junta Interventora – Medín-Cristinziano- acaban de publicar un organigrama que conduce al mismo fin, pero por el camino de la imposición.
Se sabe que existen dos órganos independientes: Tribunal de Disciplina y Asamblea. Por lo tanto, sus actos resultan soberanos e inalienables. Este es un principio elemental respetado desde la FIFA hacia abajo por todo el universo institucional.
Sin embargo, la Junta Interventora impuesta por el Gobierno argentino, se ha propuesto desconocer la autoridad de la Asamblea y ha convertido un «paper» a la FIFA en un «hecho consumado».
El abogado Javier Medín envió la propuesta a la FIFA como pedido de prioridad estatal hace por lo menos dos meses. Y más allá de promesas verbalizadas por funcionarios de la FIFA mencionados por Medín al Gobierno, nunca llegó de manera oficial a la Argentina algo que fehacientemente dijera «está bien, apoyamos ese plan».
La Junta Interventora desconoce la legitimidad de tal Asamblea apelando en su comunicado a la retórica sofística de la escuela filosófica de Eneas. Dice por ejemplo, que hubo una reunión, que tal reunión fue llevada a cabo por dirigentes y que tal vez haya habido entre ellos asambleístas.