En el Tribunal Nº1 de Dolores se dio inicio a los alegatos, los primeros en exponer sus fundamentos para la condena son la fiscalía y el particular damnificado, quienes solicitarán la pena máxima.
Se reanudó el juicio a los ocho rugbiers por el crimen de Fernando con el alegato de la fiscalía quienes manifestaron que los acusados sean condenados por «homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas», delito que prevé una pena de prisión perpetua.
El fiscal Gustavo García acusó a los imputados por atacar a Báez Sosa «sin que tuviera ninguna posibilidad de defenderse» y explicó que los imputados tuvieron siete minutos para elaborar el plan para matar a Fernando, ubicando a Maximo Thomsen como el líder.
«Un minuto antes, a las 4.43, personal policial que se encontraba cubriendo la seguridad de la misma vereda donde estaban los dos grupos, fueron alertados de un problema que hubo en calle 102 y tuvieron que retirarse, esto fue aprovechado por los imputados para iniciar el ataque. Atacaron a Fernando a traición», indicó García.
Además, el fiscal dijo que «filmar el inicio de la agresión es como ponerle la frutilla al postre. Si se necesitaba algo más para confirmar que se pusieron de acuerdo es esto: filmar el inicio del ataque» y agregó «se pusieron de acuerdo de antemano para matar a una persona. Esto no requiere mucha deliberación. Puede ser en el momento».
Por último, donde hizo hincapié en la participación de todos los acusados: «Todos hicieron todo. Todos se pusieron de acuerdo. Todos lo golpearon. Todos se turnaban. No nos quedemos solo con los videos porque nos dan solo un parte de la pelea: el 21,8% del hecho está sin filmar. Hay 23 testigos que pueden reponer eso. Nunca vi un hecho donde haya habido 23 testigos presenciales».
