Roger Terán y su segundo, Fabio Aquino, declararon ante el juez federal Sergio Torres y, a pesar de la contundencia de las escuchas telefónicas, dijeron que no pertenecen a bandas narco.
El juez Sergio Torres avanzó hoy con las indagatorias de los 26 detenidos -el menor ya había declarado ayer- en la causa que investiga a la banda acusada de trasladar toneladas de marihuana de Paraguay para repartirlas en siete provincias argentinas.
«Roger» Terán fue trasladado desde el edificio Centinela, donde pasó la noche, y esperó en una camioneta de Gendarmería Nacional hasta que al mediodía los custodios lo subieron al cuarto piso del edificio de Comodoro Py. Lo mismo sucedió con Aquino, el viceintendente de Itatí, que se despegó de los delitos y también de las actividades de su jefe.
Aquino aseguró que tenía una mala relación con Terán, que quiso renunciar al cargo y su superior se lo impidió, y que desconocía si el intendente había tenido que ver con el tráfico de drogas.
Para esa hora ya habían declarado las cinco mujeres acusadas -varias de ellas policías- y el menor de edad ya había sido liberado.