El narcotraficante colombiano Henry de Jesús López Londoño, alias «Mi Sangre», fue extraditado a Estados Unidos en un operativo secreto que contó con la participación de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) e Interpol.
Mi Sangre está acusado «de asociación ilícita o concierto para delinquir para distribuir una sustancia controlada (cinco kilos o más de cocaína) a sabiendas de que dicha sustancia se importaría ilegalmente a ese país”. El narco será juzgado por el Tribunal Federal de Primera Instancia del Distrito Sur de Florida.
El colombiano está acusado de haber integrado la banda «Los Urabeños» comandada por el jefe paramilitar «Don Berna», quien fuera extraditado a Estados Unidos junto a otros narcotraficantes en 2008. Mi Sangre pagó a abogados de Argentina, Colombia y Estados Unidos para no ser extraditado, pero su periplo judicial en el país terminó cuando la Corte Suprema de Justicia avaló el pedido de la justicia estadounidense.
López estaba en la cárcel de Ezeiza desde 2012, cuando fue apresado a las afueras de un lujoso restaurante de Pilar. Había llegado a Argentina el año anterior, instalado en diferentes countrys y chacras para no ser detectado.
