Por falta de gasoductos hay problemas en Mar del Plata, Santa Fe, zonas de la Patagonia y otras ciudades; el Gobierno prometió terminar las obras.
Miles de personas que viven en las cercanías de la red de distribución no tienen acceso al servicio debido a que el gobierno anterior no completó las obras que había anunciado y las empresas, con atrasos en las tarifas, no contaron con fondos para afrontarlas.
Los habitantes de Mar del Plata, zonas aledañas a la cordillera de los Andes, un cordobés o un empresario santafecino que construya un edificio, un local comercial o incluso en algunos casos una casa de familia difícilmente se les conceda el servicio de gas por falta de infraestructura.
Según los números oficiales, en total hay 140.500 potenciales clientes de gas que hoy no cuentan con el servicio por obras que se prometieron. Son unas 562.000 personas.
Uno de los casos más emblemáticos está en el Sur. En 2013, el gobierno de Cristina Kirchner anunció la ampliación de la capacidad de transporte de gas del sistema Cordillerano-Patagónico, que iba a permitir conectar a la red a 3000 nuevos clientes (unas 12.000 personas) y debía estar finalizada antes del invierno de 2014. Aún no fue terminada.