Quiénes son los tres rehenes argentinos que aún siguen cautivos por Hamas

El acuerdo entre Israel y el grupo terrorista impulsado por Donald Trump busca el regreso de los secuestrados. Cuándo sería.


Dos años después del ataque perpetrado por Hamas el 7 de octubre de 2023 en el sur de Israel, que dejó cientos de víctimas y más de 200 personas secuestradas, se registran avances en la situación de los rehenes.

Un acuerdo entre Israel y Hamas, impulsado por el presidente estadounidense Donald Trump, establece la entrega de los rehenes vivos y la retirada progresiva de tropas israelíes de algunos territorios palestinos, en una primera fase del cese del fuego.

Según la Oficina del Primer Ministro de Israel, 48 personas permanecen secuestradas en Gaza: aproximadamente 20 se presume que siguen con vida y 26 han sido confirmadas como fallecidas. Entre los rehenes vivos se encuentran tres argentinos, todos residentes en Israel desde hace décadas.

Los rehenes argentinos

  • Ariel y David Cunio, hermanos, secuestrados en el kibutz Nir Oz.

    • Ariel permaneció con su novia durante el secuestro; ella fue liberada en febrero.

    • David fue capturado junto a su esposa y sus mellizas, quienes ya fueron liberadas en la primera tregua.

    • La familia reside en Israel desde 1986 y sus nietas viven el trauma de la ausencia de su padre y tío.

  • Eitan Horn, secuestrado mientras visitaba a su hermano en el mismo kibutz. Su hermano fue liberado en febrero, pero Eitan sigue cautivo.

Además de los argentinos, entre los rehenes vivos hay ciudadanos israelíes, soldados y extranjeros, todos secuestrados durante el ataque a comunidades cercanas a Gaza y el festival de música Nova. Entre ellos se incluyen soldados, miembros de familias y civiles que ayudaban a otros durante el ataque.

Los rehenes fallecidos

Entre los 26 secuestrados fallecidos se encuentra otro argentino, Lior Rudaeff, junto a ciudadanos de Israel y extranjeros. Sus cuerpos permanecen en Gaza.

El ataque de 2023 generó una crisis humanitaria y militar sin precedentes, con miles de desplazados y una fuerte ofensiva israelí en Gaza. Tras dos años de enfrentamientos, el acuerdo actual abre una posible vía para la liberación de los rehenes y el cese de hostilidades, aunque el proceso se encuentra en sus primeras etapas y dependerá de la implementación efectiva del pacto.

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