La plataforma permite a menores de edad participar en juegos de azar sin solicitar verificación de datos.
El evento “Párense de manos”, que se celebra hoy en el Estadio de Vélez y reúne peleas de aficionados, música e influencers, está envuelto en polémica por contar como principal auspiciante a Stake, un sitio de apuestas online que opera de manera ilegal en Argentina.
Stake permite a menores de edad participar en juegos de azar sin solicitar verificación de datos, lo que ha generado preocupación en un contexto donde las apuestas ilegales están impactando negativamente en colegios y familias de todo el país.
La situación es especialmente controvertida dado que la Cámara de Diputados aprobó recientemente una ley para restringir la publicidad de casinos legales, aún pendiente de sanción en el Senado, mientras que los operadores ilegales parecen actuar con libertad.
Una noche de influencers bajo la lupa
El evento contará con la participación de figuras destacadas como Sergio “Maravilla” Martínez, Pablo Migliore, el Turco García, Flor Vigna, y los streamers Tomás Mazza y Robleis, entre otros. Sin embargo, el auspicio de Stake ha generado fuertes críticas, especialmente porque se espera que más de 500 mil personas, en su mayoría jóvenes, sigan la transmisión en vivo.
Stake ya había sido denunciado en septiembre por operar sin controles adecuados, permitiendo el acceso a menores y evadiendo impuestos. Según la Cámara de Salas de Casinos, Bingos y Anexos, este tipo de prácticas no solo violan las leyes locales sobre juegos de azar, sino que también representan un riesgo grave para los jóvenes al fomentar la ludopatía y el juego clandestino.
Acción judicial y llamado a la responsabilidad
La Cámara ha presentado una denuncia penal contra Stake, solicitando a las autoridades judiciales y reguladoras investigar sus operaciones y frenar su actividad ilegal en el país. Además, han instalado a los organizadores de eventos y culturales para evitar asociarse con empresas que no respetan las normativas deportivas vigentes, para proteger a los menores y garantizar un entorno de juego seguro y regulado.
El caso pone de aliviar la necesidad urgente de reforzar los controles sobre las apuestas online y de aumentar la conciencia sobre los peligros asociados a estas plataformas, especialmente en eventos masivos que atraen a un público joven e influenciable.