La ex primera dama cambió de representante legal: ya no será asesorada por Juan Pablo Fioribello.
A tan solo un día de la denuncia de Fabiola Yánez a Alberto Fernández por violencia de género, la ex primera dama designó este jueves a su nueva abogada. Se trata de Mariana Gallego, especialista en derecho de familia y pareja de Mauricio D’Alessandro, exdiputado provincial en Buenos Aires.
Gallego es especialista en derecho de Familia y es muy conocida en los medios de comunicación. Es pareja de Mauricio D’Alessandro, exdiputado provincial en Buenos Aires. Además, es conocida por representar a Rodrigo de Paul, la conductora Mirtha Legrand y su nieta, la actriz Juana Viale.
Gallego fue consultada en radio Rivadavia sobre las medidas de restricción que se aplicaron contra Alberto Fernández y aseguró que son «impecables, es lo que corresponde en los casos de violencia».
«El hostigamiento, el acoso puede ser interposita persona que creo que es de lo que se sospecha en este caso. Que hubo terceros que intentaron evitar que Fabiola visibilice lo que había estado viviendo», opinó y enfatizó que si hay funcionarios públicos que se enteraron o fueron testigos de estos hechos «tienen el deber de denunciar».
Mientras esto ocurre, comenzó otro proceso judicial, en este caso, contra Juan Pablo Fioribello, quien fue denunciado ante el Tribunal de Disciplina del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal.
La denuncia fue presentada por el letrado Jeremías Rodríguez, que acusó a Fioribello de violar el secreto profesional, asesorar simultáneamente a personas con intereses opuestos y ventilar detalles de un expediente confidencial.
En la denuncia presentada por Rodríguez, se señala que Fioribello no solo violó el secreto profesional al divulgar conversaciones privadas con sus clientes, sino que también asesoró a ambas partes en el conflicto, una acción prohibida por el Artículo 10 de la Ley 23.187, que regula el ejercicio de la abogacía en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esta ley establece que un abogado no puede representar, patrocinar o asesorar simultáneamente a personas con intereses opuestos en una misma causa.
