La interrupción del servicio se debió a una manifestación de trabajadores tercerizados de Trenes Argentinos en las vías del Tren Roca, a la altura de Avellaneda.
Momentos de caos se vivieron en las rejas de entrada a Plaza Constitución, donde pasajeros furiosos por la interrupción de la línea de ferrocarriles General Roca comenzaron a apedrear la estación cabecera.
El servicio se detuvo producto de otro foco de incidentes en Avellaneda, donde trabajadores tercerizados de la compañía de Seguridad MCM cortaron las vías en la parada de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki en reclamo del pase a planta permanente a Trenes Argentinos.
El corte que dio inicio a las 14:20 de este jueves, fue intervenido por efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA) mediante la orden del juzgado Federal de Quilmes a cargo de Luis Armella, que indicó el desalojo de los protestantes.
Tres horas más tarde, lose empleados del MCM convocó a una asamblea en el lugar donde determinaron que levantarían la medida de fuerza para dirigirse al Ministerio de Trabajo.
En ese contexto, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, publicó un particular mensaje en la red social X donde insinúa la existencia de un accionar extraño detrás de los cortes y protestas en el tren Roca.
«Pero que cosa rara un corte de vías para pedir una reunión con un ministro. ¿No? Más raro aun, que haya pasajeros del Ramal Roca con gomeras y capuchas. Además saben que la Ministra de Trabajo manifestó la disposición de atender a los trabajadores y así y todo no levantaban el corte», apuntó.
«¿Habrá elecciones el domingo?», preguntó con ironía el funcionario.
1. Pero que cosa rara un corte de vías para pedir una reunión con un ministro. ¿No?
2. Mas raro aun, que haya pasajeros del Ramal Roca con gomeras y capuchas.
3. Además saben que la Ministra de Trabajo manifestó la disposición de atender a los trabajadores y así y todo no…— Aníbal Fernández (@FernandezAnibal) August 10, 2023
A causa del episodio en Avellaneda, el servicio del tren Roca que conecta CABA con la Zona Sur del Gran Buenos Aires quedó cortado y las instalaciones fueron cerradas para privar el acceso a los usuarios, lo que provocó que poco a poco una aglomeración de gente se fuera acumulando en los alrededores de la estación.
Instantes después, un grupo de manifestantes comenzó a apedrear el edificio y a lanzar todo tipo de objetos contundentes contra vidrios y accesos. Tras varios minutos de caos, en comunicado reciente se anunció que el transporte se reestablecerá en unos minutos.
