El pintoresco primo de Marcelo Tinelli pasó por Noche al Dente y sorprendió con las revelaciones de su pasado.
«Yo hacía shows, producía shows, y fuimos con Charly (García) y Fito (Páez) a Bogotá, Colombia, espectacular. Yo no me acuerdo nada. Pasé por un lugar que decía Museo del Vodka, era viernes, y me desperté un domingo con las uñas pintadas con notas musicales, el Skype abierto y Mimi (su pareja) llamándome», recordó.
«¿Te dormiste por dos días?», le preguntó Fer Dente. «No, no, no sé qué hice. Yo sé que me desperté con las uñas con notas musicales. Yo arranqué a tomar un viernes y me desperté un domingo», le respondió. «Y cuando me desperté pedí ayuda y digo: ‘che, no me siento bien’, y me dijeron: ‘estás bárbaro’, pero no era algo físico era algo mental. Entonces se me desprendió como un click, era algo que no era yo, que no estaba acá», afirmó.
«Lo consulté con una persona cuando regresé, hice una promesa en el aeropuerto, había justo una iglesía, me arrodillé y dije: ‘si yo llego vivo a Buenos Aires, te lo prometo, yo no tomo más’. Yo lo que quería era llegar vivo. Llegué y nunca más tomé, van a ser doce años», contó orgulloso.
«Tuve ayuda de toda la familia. Fue muy loco, una grosa en toxicología me dijo: ‘lo que te pasó a vos fue un click que hiciste’, le pagué y me dijo ‘no me vas a ver más’. ‘¿Cómo no?’, le dije. ‘Yo quiero venir el martes, el jueves’, le dije. ‘No, ya está. Vos hiciste algo que le pasa a una entre tantas personas que se te desprendió el chip del alcohol’, me contestó», detalló sobre el apoyo que tuvo el ex integrante de Los fabulosos Cadillacs.
Y agregó: «Yo no es que soy un amargo, soy mucho más divertido sin tomar, porque cuando tomaba me metía en mi propio mundo». El Tirri relaciona la canción Hacer un puente con salir de la adicción al alcohol. «Este tema me lleva ahí porque cuando lo escuché dije ‘wow’, yo tracé ese puente, hice ese puente de poder transportarme de un lado a otro estando lúcido», reveló.
El humorista Roberto Moldavsky pasó por el ciclo Noche al Dente (América TV) y recordó a su madre luego de escuchar la canción Zamba para olvidarte, de Mercedes Sosa.
«Esto me lleva a todo, a Sara, mi vieja. Mi vieja nos taladraba con Mercedes Sosa. Mi vieja era la persona que siempre me recibía con una sonrisa, no importaba la situación en la que ella estaba. Me hace mucha falta. Soy un tipo grande, mi vieja se murió de grande: se acostó a dormir y no se despertó», dijo con la voz entrecortada al borde de las lágrimas.
El humorista le contó al conductor Fer Dente que su madre le enseñó a amar a Mercedes Sosa. «Cuando Mercedes Sosa vino a cantar a Israel, yo vivía ahí, y bien a lo argentino me inventé una credencial de periodista y entré al camarín de Mercedes Sosa. Ella ya estaba en el exilio. Me contó algo hermoso. Ella estaba viviendo en Alemania, no le gustaba Alemania, muy frío. Cuando vino a Israel estábamos todos los argentinos y cantábamos las canciones, y dijo ‘me quiero quedar acá’ y el hijo le dijo ‘mamá, estás loca, qué vamos a hacer acá'», detalló. «Aprendí el amor de la negra a través de mi vieja», agregó.
«No se puede reemplazar. Mi psicóloga se enoja cuando digo que alguien es incondicional. No hay que ser incondicional, me dice. Mi vieja era incondicional. Y cuando yo dejé el negocio, imaginate para una madre judía, para dedicarme a hacer artista me miraba con cara de ‘por qué me hacés esto’. Cuando yo volvía del negocio me llamaba todos los días y me decía: ‘¿se vendió hoy?’. Cuando pasé a ser humorista me llamaba todos los días y me decía: ‘¿se rió la gente?’. Había días que no tenía show. Un día la llevé por la calle, por Juan B. Justo, para que vea un poster mío gigante y le digo: ‘mirá, mamá’ y me dijo: ‘muy parecido a vos'», relató el comediante y en el estudio todos se rieron.
Moldavsky también recordó la noche en que murió su madre. Había ido la familia a cenar a la casa de ella y contó que su mamá le había dicho «que estaba soñando recurrentemente que mi papá la venía a buscar». «Y yo le había dicho ‘decile a papi que aguante un poco más, que te necesitamos acá'», dijo.
«La necesito a pesar de que soy un boludo de 60 años, me da la sensación de que fue la persona que me más me amó en la vida», expresó entre lágrimas.