El gobernador de Jujuy y presidente de la UCR reafirmó su postura contra el diputado, luego de lograr que Juntos por el Cambio lo excluya de la coalición. Además, cómo quedó su relación con Patricia Bullrich y Mauricio Macri.
La postura del radicalismo se impuso en la pulseada interna de Juntos por el Cambio sobre qué hacer con Javier Milei y su espacio. La decisión de dejarlo de lado, que se tomó esta semana en una reunión de la Mesa Nacional, causó un nuevo temblor en la coalición opositora, con cruces entre el ala dura del PRO y la UCR.
El presidente del partido centenario y gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, sostiene su postura sobre el diputado libertario y, ahora, arremetió contra él y los dirigentes que lo respaldan, como Patricia Bullrich: «Estaría bueno que Milei recorra alguna villa miseria, no le habrá visto la cara a un pobre en su vida. Va a comprender porqué tiene que haber Estado presente, educación y salud pública cuando le mire la cara a un pobre», dijo en diálogo con De Puntín, por Continental.
Sobre la presidenta del PRO, Morales declaró: «Patricia Bullrich está en su derecho de que no le guste, pero como conjunto decidimos que Milei no forma parte de JxC. No le temo a los votos de Milei, como no le tengo miedo a los del kirchnerismo. La política no se trata de cuánto amontono».
La cuestión de los votos no es menor. En Juntos por el Cambio consideran que uno de los escenarios posibles es que en el plano nacional Milei pueda rascar el electorado más orientado hacia la derecha y que esa porción sea suficiente para frustrar la chance de un balotaje contra el Frente de Todos.
Esa idea se apoya en la orientación que el radicalismo quiere darle a la coalición, con una postura más moderada: «Creemos en el mercado pero también en un Estado que atienda cosas básicas, no tenemos nada que ver con las concepciones de Milei. Pensar en los votos es tomar el camino fácil, no debemos apartarnos de nuestros principios fundantes», argumentó Morales, quien hizo hincapié en que desde la UCR no avalarán «un plan neoliberal».
«Falta mucho para el 2023, espero que este año definamos los lineamientos de un plan económico. Creo que debería ser desarrollista, productivista y federal, pero es el debate que tenemos que dar hacia dentro de Juntos por el Cambio», continuó el gobernador jujeño, quien se consideró un político «anti-grieta».
Por último, y luego de haber dicho que se debía un «mano a mano» con Macri, Morales desarrolló: «En todo caso hay más ruido en el PRO por el liderazgo. Tengo buen diálogo con la conducción del PRO, no tanto con Mauricio».