El futbolista denunció que viene siendo amenazado en la modalidad de porno extersión con una persona que le está solicitando una impactante suma de dólares para no publicar supuestas fotos hot del Pocho.
Es muy común en el mundo de la farándula que los hackers porno se muevan como pez en el agua. El Pocho Lavezzi es uno de esos personajes queribles del mundo del futbol, lo cierto es que el futbolista está pasando la cuarentena en las playas caribeñas de Saint Barth, junto a su nueva novia brasileña. Allí comenzó a recibir una serie de amenazas y extorsiones a través de las redes sociales que terminó con dos denuncias penales en una fiscalía porteña dedicada a investigar delitos de Cibercrimen. A Lavezzi lo amenazan con distribuir videos prohibidos y conversaciones privadassi no deposita una importante suma en dólares.
«Empezaron a escribirle desde dos cuentas de Instagram. No solo a él sino también a su novia, Natalia Borges, con la que convive. Estas personas le dicen que tienen sus videos y conversaciones y le dan detalles del contenido. Por eso se le da verosimilitud a la denuncia.Aunque si fueran falsos sería una extorsión de todas formas”, explicaron fuentes que investigan el caso. Pero es el mismo Lavezzi quien reconoce los videos y las conversaciones como reales. “Son de hace varios años, pero evidentemente alguien los guardó”, señalan desde su entorno.
Lavezzi se comunicó con su abogado Mauricio D’Alessandro y el caso desembocó en dos denuncias en la fiscalía de ciber-delitos del fuero porteño, a cargo de la doctora Daniela Dupuy, y en la Justicia de instrucción. Los delitos que se investigan son por»extorsión y difusión de imágenes privadas».Un detalle: cuando contrató a D’Alessandro como su abogado le hizo firmar un contrato de confidencialidad.
Dupuy es la fiscal que investiga al docente Adrián Rowek, acusado de enviarle material sexual a un alumno de 12 años y que fue encontrado con otro en la cama, con más de 30 víctimas sospechadas. Dupuy, cabeza de la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas, también llevó a la cárcel al ex pediatra del Hospital Garrahan, Ricardo Russo, acusado de producir pornografía infantil en su propio consultorio, quien fue condenado a 10 años de prisión.