El 10 de mayo termina una nueva etapa del aislamiento social y se analiza la apertura progresiva de actividades. Las dudas siguen surgiendo en CABA y Gran Buenos Aires.
En una reunión llevada a cabo en Olivos con los especialistas sanitarios se analizó cómo seguirá la cuarentena a partir del 10 de mayo, cuando finalice la última prórroga anunciada. Una de las primeras definiciones que recibió el presidente Alberto Fernández fue que el aislamiento «fue un éxito hasta ahora».
En ese sentido, el comité de expertos entre los que se encontraban Pedro Cahn, Gonzalo Camargo, María Contrini y Eduardo López le manifestaron al jefe de Estadosu satisfacción por el éxito de la cuarentena. “Ganamos tiempo y preparamos al sistema sanitario”, coincidieron.
También le expresaron al mandatario que «la sociedad ganó en conciencia y educación sobre cómo manejarse». Fernández estuvo acompañado por el ministro de Salud, Ginés González García, y el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Durante la charla, los infectólogos le recomendaron la reapertura de actividades de trabajo, sobre todo locales (hay muchas provincias que tiene pocos contagios o hace semanas no tienen nuevos), y seguir extremando los cuidados con los mayores de 65 años.
Con la de ayer, se lanzó el «inicio de una ronda de reuniones» que se mantendrá en los próximos días para analizar si extiende el aislamiento social, preventivo y obligatorio en el país.
A pesar del diálogo fluido entre Horacio Rodríguez Larreta, Axel Kicillof y numerosos intendentes del Gran Buenos Aires, las dudas siguen en cómo continuará la cuarentena en CABA y GBA.
Según informó Clarín, el Ejecutivo porteño insistió con su pedido del retiro de comidas (“take away”, que ya funciona de hecho en buena parte de la Capital), con la terminación de excavaciones de obras habilitadas (fase 1) y con el pedido de que se abran algunos comercios de cercanía. Pero dentro de un esquema de cuarentena sin relajamientos.
En cambio se mantendrá fuertes en la decisión de no habilitar todos los negocios referidos al cuidado personal (peluquerías, manicuras, spa y gimnasios). Tampoco volverán a abrir los shoppings ni los negocios de indumentaria ni los de calzado.
Los intendentes del Conurbano, en cambio, se muestran más dispuestos a habilitar más rubros. Kicillof, en tanto, no se apura.
El problema principal en el que todo coinciden es en la necesidad de no sobrecargar el sistema de transporte, principal foco de contagio.
