Así lo decidió la Cámara Penal de San Isidro y ordenaron a la jueza volver a sustentar el por qué el condenado tenga prisión domiciliaria.
La Sala I de la Cámara de Apelaciones de San Isidro decidió revocarle el beneficio de prisión domiciliaria al exempresario Horacio Conzi, condenado a 24 años y nueve meses de prisión por el crimen de Marcos Schenone y reenvió su causa a la jueza de ejecución penal Victoria García Maañón, que le había concedido originalmente la libertad.
Según confirmaron fuentes judiciales a Infobae, la decisión se determinó luego de una apelación de la fiscal María del Carmen Gigante y que fue apoyada por el fiscal general de la jurisdicción, el doctor John Broyad. La defensa de Conzi podrá apelar la decisión.
El Juzgado de Ejecución Penal 2 benefició al exempresario de la prisión domiciliaria en abril pasado y se alojó en su domicilio en Boulogne junto a su hermano Hugo, con una pulsera electrónica en uno de sus tobillos, monitoreado por el Servicio Penitenciario Bonaerense.
La fiscal Gigante pidió en varias ocasiones que se le revocara el beneficio. Tenía motivos de sobra además del dudoso estado de Facebook: el 15 de abril, el SPB emitió un informe al Juzgado de Ejecución Penal N°2 sobre un incidente muy particular. El día anterior, Conzi se había sacado la tobillera de Conzi. “Ya solo por esto deberían revocarle la domiciliaria”, señaló una voz de peso en los tribunales.
La inspección posterior reveló que la malla de la tobillera estaba rota, con un aparente corte intencional. Ante el personal del SPB, Conzi aseguró que se cortó el dispositivo “porque le ajustaba”. También se lo vio, en un video posteado en redes sociales, paseando a dos cabras en la vereda de la casa donde debía estar preso.