Todos los elementos en contra del club Millonario serán apelados por las autoridades del club.
River Plate apelará la sanción de la Conmebol que lo obliga a jugar el partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores ante Boca en Madrid, dos partidos en 2019 a puertas cerradas y una multa económica.
«El Club Atlético River Plate informa que realizará los planteos legales y las apelaciones pertinentes en relación con lo resuelto en el día de la fecha por la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) y por su Tribunal de Disciplina, en relación al cambio de sede dispuesto sobre el partido final de la Copa Libertadores 2018, la sanción económica y la prohibición de disputar con público dos partidos oficiales organizados por CONMEBOL», explicó en un comunicado.
La sanción de la Unidad Disciplinaria fue dada a conocer hoy. Boca también presentó sus anticipados reparos a la posibilidad de tener que jugar el partido.
«IMPONER al CLUB ATLÉTICO RIVER PLATE una sanción consistente en jugar sus próximos 2 (dos) partidos como local en competiciones oficiales organizadas por la CONMEBOL a puertas cerradas. Esta sanción iniciará su vigencia a partir del año 2019», publicó en el fallo firmado por el presidente Eduardo Gross Brown, el vice Amarilis Belisario y el miembro Cristóbal Valdes.
En el detalle, la Unidad Disciplinaria explicó que «única y exclusivamente» podrán acceder al estadio «un máximo de 70 (setenta) miembros de la delegación de River, incluidos los jugadores, cuerpo técnico, personal médico, restantes oficiales y directivos del Club».