Habló con La Burbuja sobre su vida política y su visión sobre estos dos últimos años de gobierno de Mauricio Macri.
En una entrevista con el programa La Burbuja por FM Millenium, el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, apuntó a tener una «discusión seria» en cuanto a las políticas de defensa nacional y a que para realizar grandes cambios en la política «hay que tener un gran equipo». Además, contó detalles sobre su vida y su cotidianidad.
«Los políticos tienen mala fama (bastante bien ganada) por tomar beneficios para ellos en lugar de pensar en el otro», consideró el funcionario, quien aseguró que la democracia es un sistema «modesto» en el que se tiene que «tomar distancia y mantener la humildad». En este sentido, resaltó que en política «la única manera de movilizar grandes cambios es en equipo» porque «cuando crees que sos Gardel por estar en un cargo, no podés no equivocarte»
En el marco del operativo de búsqueda del submarino ARA San Juan, desaparecido la semana pasada, Pinedo remarcó que hay que «definir cuales son los objetivos y elementos para alcanzar tales fines» en cuando a políticas de defensa nacional y llamó a «acompañar a las familias de los tripulantes y honrar a los militares».
Consultado acerca de este hecho en el marco del gobierno de Mauricio Macri y en relación a la llamada «pesada herencia», afirmó: «Soy de los que toman a la Argentina con todo lo bueno y malo que tuvo. Al Gobierno anterior lo votaron 3 veces y eso hay que respetarlo. Hicieron sus macanas y nosotros tendremos las nuestras en el futuro. Si hubo corrupción, los responsables deben pagar».
Luego, se refirió a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien asumirá como senadora este 10 de diciembre y consideró que su relación «siempre fue de respeto» y que continuará de la misma forma. Sin embargo, subrayó que su tarea como presidente de la Cámara alta es «juntar consensos mayoritarios» e indicó que «hay sectores que se ponen en contra de todo lo que piensan otros sectores». «Esa es la grieta», puntualizó.
En diálogo con La Burbuja, Pinedo recordó sus 12 horas como presidente de la nación anteriores a la asunción de Macri: «Había renunciado todo el gabinete del kirchnerismo y había preocupación con el tema seguridad. Yo lo viví con muchos nervios, pero tranquilo». Y agregó: «hubiese sido lindo que un presidente democrático le entregue los atributos a otro».
Por otro lado, evaluó estos dos años de Gobierno macrista. Aseveró que durante el primer período tenían «mucho optimismo», pero que la «primera mitad del 2015 fue un catastrofe» aunque luego en el «segundo semestre, que lo tomaron como chiste, bajó la inflación, creció la economía y se generó más empleo». En contraposición, lamentó que les hubiese «gustado que la reacción de los empresarios sea más potente».
«Es un momento político de mucha responsabilidad y compromiso. Hay que incorporar una mirada de largo plazo que Argentina necesita, para que el país vaya mejorando. En eso estamos con mucho foco. La baja de la inflación es notable. Pero no hay viento de cola, el viento lo estamos construyendo», detalló.
En otra línea, confesó detalles de su vida personal: «siempre me saluda alguien en dos cuadras y una vez por mes alguno me putea. Camino tranquilo por la calle, aunque por el cargo que tengo estoy obligado a tener custodia. Hago asados. Soy fanático de Independiente pero no voy mucho a la cancha»
«He tenido una bendición que es que me dedique muchos años a recorrer los cerros de Salta y Jujuy a caballo con mis hijos. Ahi te das cuenta de que no necesitás nada. Mi momento burbuja es cualquier atardecer en la Provincia de Buenos Aires», finalizó.