El vicepresidente del Consejo de la Magistratura de la Nación se refirió a la destitución del juez Eduardo Freiler, quien había sido suspendido de su cargo.
Hace dos meses, el juez Eduardo Freiler había sido suspendido de su cargo, pero finalmente, en los últimos días el Consejo de la Magistratura decidió la destitución del juez. El veredicto se dio 6 a 1 a favor de la destitución, aunque uno de esos sufragios fue con disidencia parcial; el único voto en defensa del ahora exjuez fue de Diana Conti, diputada del Frente Para la Victoria.
Tras la decisión, el vicepresidente del Consejo de la Magistratura de la Nación Miguel Piedecasas dejó en claro que para determinar la separación hay que tener en cuenta que “para juzgar la conducta de un juez no debemos pensar en un ciudadano común, sino que debemos pensar en el ciudadano más importante de la República”. “Un juez tiene que responder a ciertos estándares éticos”, subrayó en Catalejo por FM Milenium.
Piedecasas aclaró que son tres los cargos contra Freiler y que puntualmente con el “incumplimiento en el pago de impuestos”, el Tribunal determinó que el pago de los impuestos en un juez es “una demostración de conducta”.
Por otro lado, remarcó que el “el Consejo de la Magistratura acusa” y quienes lo hicieron fueron el diputado del PRO, Pablo Tonelli y él mismo. Y luego, un jurado de enjuiciamiento “han decidido la remoción del magistrado”.
También sostuvo que “el jurado decidió remitir copias de la sentencia a la justicia penal para que se investigue” ya que hay una causa por enriquecimiento pero que había sido sobreseído. Consultado por alguna intencionalidad política subrayó que de haber existido, “la oposición hubiera votado en contra”.