Se trata del paraguayo Jonathan Fabbro. En las últimas horas se filtraron capturas de los chats que ambos mantenían por WhastApp.
El futbolista Jonathan Fabbro, ex River Plate y Boca Juniors, fue denunciado hace unos días por abusar de su ahijada de 11 años. La versión se profundizó aún más cuando se revelaron conversaciones que mantuvo con ella via Whatsapp a comienzos de abril de este año mientras estaba en México, en los últimos días de su contrato con los Jaguares de Chiapas.
«Mandá fotos» le dijo Fabbro a la niña. «No da», le respondió ella: «Pedile esas cosas a tu novia», le reprochó, en referencia a su pareja, la modelo Larissa Riquelme. «A mi novio tampoco le mando fotos así», dijo luego.
«Perdón, pero me parece que no da», le contestó ella. Luego, Fabbro se puso un poco insistente. Comenzó con emoticones, caras tristes, de llanto, caras de ansiedad. «¿Tenés jeans? A verlooo», dijo el jugador, antojadizo. «No, pollera», respondió ella. Finalmente, la niña le envió dos fotos a su padrino futbolista, ninguna en una pose sensual, ninguna imagen provocativa.
Con sospechas de la madre y el hermano de 17 años, la niña comenzó a hablar, ante el horror de su familia. No era reciente, no era algo de ayer, no habría sido apenas un chat, sino cinco años de supuestos ataques sexuales denigrantes a manos del futbolista.
Su madre acudió a la Comisaría 52° de la Policía de la Ciudad en Villa Lugano para denunciar a Fabbro, una denuncia que se convirtió en una causa penal en el Juzgado N°32 a cargo del doctor Santiago Quian Zavalía. La calificación: abuso sexual con acceso carnal agravado por vínculo. La pena máxima: 20 años de cárcel. Los chats entre su hija y Fabbro fueron incorporados al expediente. Hoy, ilustran esta nota.