El ex vicepresidente tenía que ampliar su declaración indagatoria pero en vez de eso presentó un escrito donde le exige al magistrado que se aparte del expediente
El ex vicepresidente Amado Boudou se presentó este jueves en los Tribunales de Retiro una recusación al juez Ariel Lijo del expediente que lo acusa de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito por considerar que su detención fue «arbitraria e ilegal».
En declaraciones a la prensa a la salida de su presentación, el ex funcionario señaló: «Espero poder dar explicaciones ante un juez imparcial donde yo pueda dar explicaciones y no se produzcan las parcialidades y los distintos ritmos que han venido dándose en los últimos cinco años en estas causas».
En este marco, aseguró que junto con su defensa intentaron «no recusar» a Lijo, pero que «llegó a un límite con la detención» que opinó que «excede» al tiempo que argumentó que «no se obró en base a la Justicia». «Fue una detención arbitraria e ilegal donde no había un extremo que se cumpliera para que yo pudiera ser detenido», insistió.
Luego de su excarcelación, Boudou debía ampliar su declaración ante el magistrado. No obstante, el ex vicepresidente kirchnerista le volvió a pedir al juez que se aparte de la causa en un escrito de 12 páginas donde apuntó contra Lijo por «un prolongado e injustificado encierro, sin siquiera haber resuelto su situación procesal».
En tanto, denunció allí mismo que el juez «se apartó de circunstancias debidamente comprobadas y del derecho vigente, inventando hechos, ampliando injustificadamente el objeto procesal del proceso para así fundar en ‘apariencia’ la arbitraria orden de detención en su perjuicio».
Al salir del tribunal, Boudou sacó provecho del contacto con la prensa y pidió «por todos los perseguidos políticos, los presos, aquellos presos que no son políticos pero que están con prisión preventiva hace muchos años».