El hecho que tuvo lugar durante el partido entre Portugal y Uruguay contó también con un mensaje en apoyo a Ucrania y pidiendo respeto por las mujeres iraníes.
Mientras Portugal y Uruguay disputaban su respectivo encuentro por la fecha 2 del grupo H de la Copa del Mundo en Qatar, un sujeto irrumpió en el campo de juego con mensajes a favor de la comunidad LGTB a pesar de las advertencias presentadas de antemano tanto por el país sede como por la FIFA en cuanto a este tipo de manifestaciones por cuestiones ideológicas.
Además de la bandera, la cual se la arrojó al pasar al árbitro del partido, esta persona se mostró con una remera con la leyenda «Salven a Ucrania» en la parte delantera haciendo alusión al conflicto con Rusia, mientras que en la espalda se leía «Respeto para las mujeres iraníes«.
Inmediatamente fue intervenido por la seguridad del estadio y las cámaras de la transmisión oficial evitaron mostrar las imágenes que ya fueron viralizadas.
Previamente, algunos combinados europeos pretendían que la cinta de capitán cuente con los colores de dicha comunidad acompañado del mensaje «One Love» en pro de la inclusión y contra la discriminación, aunque desistieron ante las amenazas de sanciones deportivas.
«La FIFA ha sido muy clara, impondrá sanciones deportivas si nuestros capitanes portan los brazaletes sobre el campo. Como federaciones nacionales, no podemos pedir a nuestros jugadores que se arriesguen a sanciones deportivas, incluidas tarjetas amarillas», comunicaron dichas Selecciones.
