El diputado de Juntos por el Cambio también cuestionó la intención del Gobierno de poner en pie «una empresa estatal de alimentos» para controlar el mercado.
La llegada del avión venezolano con una tripulación de 19 personas, entre ellos cinco iraníes, sigue dando de qué hablar. Desde Juntos por el Cambio, a través de los diputados Ricardo López Murphy y Gerardo Milman oficializaron la denuncia al ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, y al titular de la AFI, Agustín Rossi, por sus dichos ante el arribo de la aeronave a la Argentina.
«La denuncia fue por las excusas cuando dijeron que en lugar de un terrorista era un homónimo y hablaban de que estaban enseñando a manejar un avión. Hubo todo una cortina de humo, recuerde las expresiones», contó López Murphy en diálogo con Pablo Rossi en Esta mañana por Radio Rivadavia.
«Acá no hay homónimo ni están aprendiendo a volar, acá ha habido un manejo por parte del Gobierno totalmente improvisado, sin conexión y sin coordinación, y con episodios que tratan de ocultar la verdadera naturaleza de los personajes«, insistió el diputado.
Asimismo, el referente liberal aseguró que el accionar del Gobierno está vinculado a la participación del mandatario Alberto Fernández en la Cumbre de las Américas donde «quiso ser vocero de las tiranías sangrientas de América Latina». «En ese rol es comprensible que cuando viene un avión vinculado a Irán, bajo un maquillaje venezolano, no sepan que decir porque están aliados a los personajes que actúan de esta manera», afirmó.
En la misma línea, cuestionó la inacción de las agencias del Estado ante los avisos que, según considera, «llegaron inmediatamente» el avión arribó a Córdoba. «Este avión tiene la historia de ser proveedor de armas para grupos terroristas, ese es el factor esencial de esto», denunció López Murphy sobre el Boeing 747-3B3(M) Dreamliner.
Por otro lado, habló del apoyo de políticos argentinos al triunfo de Gustavo Petro y aseguró que «es imposible hacer funcionar a una economía capitalista con gente que maneja las cosas de esta manera». Además, repudió los lazos con Vladimir Putin, y la bilateral que mantuvo Alberto Fernández, en la que puso a disposición la Argentina para que sea «la puerta de entrada» de Rusia a Latinoamérica.
Por último, el diputado opositor definió de «delirante» las intenciones del mandatario para la puesta en pie de una empresa estatal de alimentos con el objetivo de controlar del mercado. «Tenemos un fenómeno inflacionario fuera de control, tenemos problemas severos de reserva y un gasto público desbordado, no podemos colocar ningún bono en el mercado de capitales, hemos dañado el mercado de capitales doméstico, en ese contexto es impensado ponerse a pensar en desarrollar nuevas empresas, invertir recursos. Es algo delirante«, cerró.