La asociación aseguró que coordinará un plan con las autoridades nacionales para repatriar a los argentinos que estén en territorio israelí.
Luego del bombardeo que dejó al menos ocho muertos y más de 150 heridos en Israel, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) informó que reforzará las medidas de seguridad en instituciones judías de la Argentina. Además, coordinará con autoridades nacionales un plan de repatriación para los argentinos que se encuentran en territorio israelí.
“La DAIA expresa su respaldo al Estado de Israel en su objetivo de resguardar la vida de su pueblo ante una amenaza global”, expresó la entidad en un comunicado difundido a través de la red social X (antes Twitter).
El Departamento de Asistencia Comunitaria (DAC) ya trabaja en coordinación con ministerios nacionales y fuerzas de seguridad, tanto federales como locales, para delimitar un plan preventivo ante la amenaza del régimen iraní. Según la publicación, el objetivo es “incrementar la protección de las instituciones judías”, y se recomendó a la comunidad estar atenta a futuras comunicaciones oficiales.
En el mismo comunicado, la DAIA también manifestó su preocupación por la situación de los argentinos que participan en programas educativos o religiosos en Israel.
“Se están realizando gestiones con diferentes organismos gubernamentales para facilitar el regreso de estos ciudadanos a la República Argentina”, indicaron.
La ofensiva iraní y la respuesta israelí
Durante el sábado, Irán lanzó una ofensiva con misiles sobre el norte de Israel, especialmente en la región de Haifa, donde un edificio de cuatro plantas colapsó tras el impacto, provocando ocho muertes y más de 150 heridos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) activaron el sistema de defensa Cúpula de Hierro, que logró interceptar parte de los proyectiles, aunque algunos lograron impactar en zonas residenciales. Vecinos de Haifa registraron en video el despliegue del sistema antimisiles y el momento de los ataques.
Como respuesta, Israel atacó varias instalaciones militares en Teherán y otras regiones. Entre los objetivos alcanzados estuvieron:
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El Ministerio de Defensa iraní, donde se reportaron daños leves.
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Depósitos de combustible en Shahran (noroeste) y en el sur de Teherán.
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Una instalación subterránea de misiles en el oeste de Irán.
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Infraestructura energética en la provincia de Bushehr, incluido el yacimiento de gas South Pars, la refinería Fajr Jam y el puerto de GNL de Kangan.
Medios iraníes confirmaron que un dron israelí impactó en una refinería, provocando un incendio y la paralización de operaciones en el yacimiento South Pars.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anticipó una escalada:
“Muy pronto verán aviones de la Fuerza Aérea israelí sobre los cielos de Teherán. Atacaremos todos los objetivos del régimen de los ayatolás”.
El ministro de Defensa, Israel Katz, fue aún más contundente:
“Teherán arderá si continúan los ataques. El pueblo iraní pagará un alto precio por poner en peligro a los ciudadanos israelíes”.
