Leandro Paredes y el «Cuti» Romero le dieron la victoria a la «Scaloneta» en Yakarta.
La selección Argentina se impuso por 2 a 0 a Indonesia en el cierre de su gira por Asia. Un derechazo espectacular de Leandro Paredes y otro tanto de Cristian Romero, le dieron la ventaja a los dirigidos por Scaloni, que sin Messi ni Di Maria, no tuvieron problemas para despachar a un pobre seleccionado asiático.
Los 11 de la “Scaloneta” fueron: Dibu Martínez; Nahuel Molina, Cristian Romero, Germán Pezzella, Facundo Medina; Exequiel Palacios, Leandro Paredes y Giovani Lo Celso; Facundo Buonanotte, Julián Álvarez y Nicolás González.
El encuentro comenzó con la clásica presión de la Selección argentina, en la que buscó y logró provocar el error de los defensores rivales y acechó con criterio al arco rival. En los primeros minutos, se destacó una buena combinación de pases entre Paredes y Julián Álvarez que culminó con un centro que cruzó el arco y no pudo ser conectado por ningún futbolista argentino.
Argentina expandió su dominio con el correr de los minutos y, aunque le costó ser punzante, Nicolás González se mostró como la carta de más peligro con un remate rasante que logró contener el arquero Ari Sutaryadi con muy buenos reflejos.
El equipo que dirige el coreano Shin Tae-yong intentó revelarse ante el juego que propuso el conjunto de Lionel Scaloni, pero sus intenciones se vieron opacadas por la rápida recuperación de la Selección que cambió el peligro por el contraataque para intentar abrir el marcador.
Después de una primera parte en la que la Selección tuvo el control de la pelota pero le costó generar opciones claras de gol, un disparo de media distancia de Paredes a los 37 del periodo inicial le dió el 1-0 parcial.
En el complemento, el gol llegó más rápido y a los 10´, tras un córner, el “Cuti” Romero anticipó a toda la defensa de los locales y le cambió el palo al arquero Ari Sutaryadi para poner el 2-0 en Yakarta. Pese a aumentarse la ventaja, Indonesia sorprendió, ya que, con dos modificaciones, apostó a un juego más vertiginoso y puso en aprietos al equipo nacional: desde un lateral largo, el balón fue desviado y, cuando parecía que lo superaba al arquero argentino, Martínez llegó a manotear la pelota al tiro de esquina.
Cuando el panorama pareció darle algo de esperanzas al equipo local, Argentina se encargó de enterrar la mismas con el segundo tanto del encuentro: desde un tiro de esquina, el defensor Cristian Romero anticipó a toda la defensa y con un cabezazo le cambió el palo al arquero Ari Sutaryadi.
Con el correr de los minutos, el juego decayó en su intensidad, Indonesia se mostró más participativo en la distribución del balón, pero no pudo lastimar a una Argentina que manejó los tiempos con la tenencia del balón y, aunque no fue claro, buscó ampliar el marcador, algo que finalmente no sucedió.
