Un nuevo informe de opinión pública revela cuáles son los gobernadores e intendentes mejor valorados por sus ciudadanos en el mes de mayo de 2025.
Encabezando la lista de gobernadores más valorados por sus co-provincianos se encuentra Osvaldo Jaldo (Tucumán), quien lidera con un 61,5% de imagen positiva. Lo siguen de cerca Leandro Zdero (Chaco) con un 61,2%, y Ignacio Torres (Chubut) con un 60,8%, consolidando su respaldo entre los ciudadanos.
Por otro lado, los gobernadores con menor aprobación del mes son Ricardo Quintela (La Rioja), con un 41,4%, seguido por Axel Kicillof (Provincia de Buenos Aires) con 43,4%, y Alberto Weretilneck (Río Negro) con 43,6%.
Crecimientos y caídas en la imagen pública
El gobernador que más incrementó su imagen positiva en el último mes fue Claudio Vidal, de Santa Cruz, quien registró un aumento de +4,2% en comparación con la medición anterior. Por el contrario, el mandatario provincial que más perdió apoyo fue Gerardo Zamora, de Santiago del Estero, con una disminución de -2,8% en su aprobación.
¿Quiénes son los intendentes mejor valorados?
El ranking también destaca a los intendentes con mayor respaldo de sus vecinos. En primer lugar se posiciona Matías Stevanato (Maipú) con un 61,3% de aprobación, seguido por Leonardo Stelatto (Posadas) con 60,4%, y Eduardo Tassano (Corrientes Capital), quien alcanza el 60,0% de imagen positiva.
En la otra punta de la lista, los intendentes con menor imagen positiva del mes de mayo son Julio Alak (La Plata), con un 36,3%, Walter Cortés (Bariloche), con 36,5%, y Pablo Grasso (Río Gallegos), con 36,9%.
Variaciones en la aprobación de los intendentes
Entre los intendentes con mayores cambios en su imagen, destaca Gastón Hissa (San Luis), quien logró un incremento de +3,2% en su imagen positiva. En contraste, el funcionario que más cayó en la medición fue Julio Alak (La Plata), con una baja de -2,6% en su aprobación.
Estos datos reflejan el movimiento en la percepción de los ciudadanos respecto a sus gobernantes, en un contexto donde la gestión y las decisiones políticas juegan un papel clave en la confianza pública.