El canciller expuso en la inauguración de la cumbre del bloque y sostuvo que el tratado «es una señal política necesaria, en un contexto de conflicto e incertidumbre crecientes».
El canciller Santiago Cafiero expuso esta mañana en la LXII Reunión ordinaria del Consejo del Mercado Común de los Estados parte del MERCOSUR y Bolivia.
En la ciudad de Puerto Iguazú, el Canciller argentino destacó que “a partir del trabajo y la vocación de todas las áreas técnicas de los países que integran el bloque se puede avanzar con decisión y determinación política en mejorar y ampliar espacios de integración en nuestra región”.
Y amplió: “Es un mundo distinto, que arroja prioridades y oportunidades y tenemos entre todos que confiar en el trabajo de los Estados parte para avanzar en una misma lógica, porque la globalización como se la conoció hasta hace un tiempo ya no es más; lo que se abre paso es la globalización de regiones”.
“En este tiempo de incertidumbre, tenemos que fortalecernos como bloque y achicar las brechas de desarrollo, porque en el mundo actual tenemos ese desafío como región y eso se logra a través de más integración y no de menos. No vamos a conseguir nada si nos desintegramos”, aseveró el titular del Palacio San Martín.
El Canciller argentino subrayó que “logramos el año pasado un comercio récord desde el MERCOSUR; con un crecimiento del 48 por ciento entre el 2019 y el 2022 en cuanto al comercio exterior; más de 750 mil millones de dólares,, eso fue lo que el bloque creció en términos de exportaciones”.
Respecto del Acuerdo Mercosur – Unión Europea, Cafiero consideró que “la profundización del vínculo entre el MERCOSUR y la UE es una señal política necesaria, en un contexto internacional de conflicto e incertidumbre crecientes. El acuerdo puede ser, en nuestra opinión, un vehículo eficaz para que nuestro bloque pueda potenciar su participación en el reacomodamiento del mapa global de la producción y el trabajo”. “Es una discusión de autonomía geopolítica”, sentenció.
El titular del Palacio San Martín puso de relieve que “el Acuerdo puede funcionar, también, como marco para catalizar inversiones en sectores estratégicos como energías (convencionales y renovables), minería, alimentos, servicios basados en el conocimiento, y salud, entre otros. Sin embargo, para materializar estas potencialidades y que el Acuerdo tenga buenos resultados para ambas partes, es necesario trabajar y actualizar los textos del 2019. El Acuerdo MERCOSUR-UE, tal como fue cerrado en 2019, refleja un esfuerzo desigual entre bloques asimétricos y no responde al escenario internacional actual”.
Cafiero, continuando con el balance de los seis meses de la PPT argentina, recordó que durante este período tuvo lugar la reunión de Ministros de Energía del bloque, y enfatizó que “lograr el objetivo de una integración energética plena en el MERCOSUR y la región nos obliga a redoblar esfuerzos para construir consensos estratégicos y ser operativos en obras de infraestructura, inversiones y capacidades logísticas y de comercialización.
Asimismo, informó sobre la continuidad del Foro Empresarial del MERCOSUR, focalizado en cinco ejes temáticos: las cadenas de valor en el sector biotecnológico; la transición hacia la movilidad sustentable en el sector automotor, junto a la producción de equipamientos médicos y el desarrollo de medicamentos en el sector de la salud; y la integración de los servicios de publicidad en el sector audiovisual. Y puso de relieve que “abordamos la perspectiva de género y el rol de las mujeres empresarias en el comercio exterior de nuestro bloque”.
“Dimos el paso inicial para trabajar en un programa que establezca y promueva el Sello del Buen Diseño del MERCOSUR. El objetivo es fortalecer la innovación y la inserción en los mercados internacionales de las pequeñas y medianas empresas del bloque, para potenciar sus capacidades, reconocer la riqueza y refinamiento de nuestras culturas y fortalecer una identidad regional”, añadió.
En ese sentido, puntualizó que este tema, junto con la conclusión de la octava Ronda de Comercio de Servicios, “son instrumentos clave para la profundización de nuestro proceso de integración y su articulación con un mundo en transformación. Ratifico en estos temas la disposición de la Argentina para avanzar durante la Presidencia Pro Tempore Brasileña”, que será el segundo semestre de este año.