El presidente anunció que enviarán 1400 efectivos para combatir el narcotráfico y advirtió que «le caerá todo el peso de la ley a quien participe de esas organizaciones».
El presidente Alberto Fernández anunció que enviará un refuerzo de fuerzas federales a la Ciudad de Rosario, en medio de un contexto en el que la cifra marca que hay un crimen por día vinculado al narcotráfico. En marzo, los números son aún peores ya que marcan que se registra más de un muerto cada 24 horas.
Por esta razón, se movilizarán 1400 efectivos hacia la ciudad santafesina para apoyar a las fuerzas policiales de la provincia. Además, Aníbal Fernández viajará durante la jornada del miércoles para organizar el operativo.
Ante este panorama, el presidente comunicó que se decidió que el ejército argentino a través de su compañía de ingenieros «participe de la urbanización de barrios populares acelerando tareas pendientes que son muy necesarias».
Por otra parte, Fernández adelantó que mañana Omar Perotti firmará un convenio con la Unidad de Información Financiera (UIF) para instalar una delegación en Rosario. «Buscamos tener una mayor eficiencia en la lucha contra el lavado de activos derivados, entre otras causas, del narcotráfico».
Entre otras medidas, remarcó la instalación de 600 cámaras de reconocimiento facial de última generación. Asimismo, aseguró que en las cárceles se extremarán las custodias contra los reclusos que fueron condenados y pretendan desde el mismo establecimiento continuar delinquiendo.
«Rosario nos necesita, estamos tomando medidas contundentes. No nos tiembla el pulso para combatir esta problemática. Le caerá todo el peso de la ley a quien participe de esas organizaciones de forma activa o pasiva», reflexionó el presidente.
Por último, señaló que muchos hacen un «juego político» para sacar provecho de esta situación. «No permitiremos un sólo acto más de impunidad», concluyó.
