Fernando José Marino tenía 28 años y hacía una semana había comenzado a trabajar como repartidor. Dos delincuentes armados lo mataron mientras entregaba un pedido.
El pasado lunes al mediodía, en el barrio bonaerense de Adrogué, repartidor que se encontraba trabajando tras haber iniciado solo una semana atrás su nuevo empleo fue asesinado de un tiro en el pecho por dos delincuentes que, se presume, intentaron robarle su camioneta.
Fernando José Marino, como se llamaba el hombre de 28 años, circulaba a baja velocidad por la calle Italia al 900, buscando una dirección donde dejar uno de los pedidos que su empresa, que distribuye encargos realizados vía Mercado Libre, le había encomendado. Fue en ese momento cuando una moto azul con dos personas armadas lo interceptaron y, tras una mala maniobra por parte de Marino, le dispararon a quemarropa para luego darse a la fuga sin efectuar el robo.
Tras la llamada de los vecinos a la policía, y ante la tardanza de la ambulancia que debía llevarlo al hospital, fue uno de los efectivos quien lo trasladó en su patrullero al hospital Lucio Meléndez, donde fallecería de un paro cardiorespiratorio. Ocurrido el suceso, varios fueron sus familiares que lo recordaron con emotivos mensajes:
“Querido sobrino, un hijo más para mí. Ayer te vi, nos abrazamos y me dijiste que estabas contento con tu nuevo trabajo y tus proyectos. Pero en tu camino se cruzaron dos hijos de mil putas y por nada te arrebataron tus sueños y la vida ¿Pedir justicia? ¿Qué justicia? Ya sos un ángel en el cielo. Por siempre en mi mente y mi corazón”, escribió tío Jorge en su cuenta de Facebook.
Otro de los que le dedicó un mensaje fue Matías, su primo. “Te juro, cabeza, que no te das una idea de lo mal que la estamos pasando. Necesito que entres por la puerta del mosquitero, cagándote de risa, y nos digas que todo esto es una joda. Y si no, andá subiendo que allá arriba te vas a encontrar con tu abuelo Kiko», reflexionó y agregó también vía Facebook: “Te extraño, Fer. Y eso que te fuiste hace un rato. Supongo que tendré que aprender a manejarlo. Tu compañía era reconfortante, si te querían hasta mis amigos. Era una caricia al alma reírse con vos pero, si me permitís, voy a llorarte un poco más”.
“Cuando mataban a alguien siempre pensaba ‘pobre familia’. Hoy me tocó de adentro y te da ganas de pelear por una justicia mejor. Esto es una verdadera mierda lo que está pasando, nos estamos matando entre todos”, escribió por su parte José, padrino del joven asesinado, y cerró: “Quiero justicia para mi ahijado, me arrancaron un pedazo de mi vida. No entiendo cómo hay abogados, jueces y fiscales que dejan libres a los chorros y todavía tienen la matrícula, y pueden ejercer y decidir quién sale y quién no sale, es una locura”.
Cabe destacar que aún no se conocieron los resultados de la autopsia realizada sobre el cuerpo de Fernando, los cuales se esperan para las próximas horas. El fiscal Gerardo Mohoraz, de la UFI Nº 6 de Lomas de Zamora, se encuentra a cargo de la investigación que buscará dar con la ubicación de los motochorros autores del crimen tras analizar las cámaras de seguridad de la zona.