Pedirán ampliar a diez años la inhabilitación para el endoscopista Diego Bialolekier y solicitarán que se revea la decisión del tribunal de absolver a la anestesista Nélida Puente.
Este mediodía, la familia de Débora Pérez Volpin apelará el fallo del juicio por la muerte de la periodista en febrero de 2018 en el Sanatorio La Trinidad mientras le realizaba una endoscopía.
El abogado Diego Pirota pedirá que la inhabilitación para el endoscopista Diego Bialolenkier aumente a diez años y, además, solicitará que se revise la decisión judicial de absolver a la anestesista Nélida Puente. Ambos profesionales intervinieron en la endoscopia que terminó con la vida de la periodista.
Por su parte, el martes el abogado de la familia de la periodista se presentará como querellante contra Galeno, la empresa dueña del Sanatorio La Trinidad. Previo a la presentación de Pirota la Justicia ya dio inicio formal a la causa penal que investigará a los directivos de la compañía por el presunto encubrimiento de las causas que llevaron a la muerte de Débora.
La sentencia
El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional número 8 de la Capital Federal, condenó a Bialolenkier a tres años de prisión condicional y 7 años y 6 meses de inhabilitación para ejercer su profesión, mientras que absolvió a la anestesista Puente.
Para el tribunal, el endoscopista “faltó a su deber de cuidado” y determinó la absolución de la anestesista bajo el argumento de que “realizó todas las maniobras para asistir a la víctima más allá de no haber tenido éxito”.
El tribunal consideró que el hecho de que Bialolekier no haya informado al resto del equipo médico sobre la perforación de las vías digestivas causada por un exceso de fuerza al introducir el endoscopio contribuyó a que las maniobras de reanimación no fueran efectivas.
Respecto de la anestesióloga el tribunal indicó que “aún cuando la acusada hubiera realizado todas las maniobras que las partes acusadoras consideraban adecuadas al caso el resultado se habría producido de todas maneras”.