Los fenómenos afectaron zonas ya castigadas en el centro del país. Y se sintieron muy fuerte en la capital italiana.
En medio de continuas tormentas de nieve y viento, tres nuevos terremotos se registraron esta mañana entre las 10,24 y las 11,25 hora italiana (cuatro horas antes en la Argentina) en las zonas ya castigadas desde el 24 de agosto en los montes Apeninos de la Italia central.
Los habitantes, sometidos a duras pruebas por los sacudones telúricos y el mal tiempo, trataron de huir de sus viviendas que estaban medio sepultadas por la nieve.
En Roma, el fenómeno se sintió muy fuerte. Debieron abandonar su vivienda miles de romanos, mientras todo temblaba.
El sistema de subterráneos de la capital italiana fue de inmediato clausurado hasta que se realicen las verificaciones técnicas. En muchas escuelas fueron evacuados los alumnos, sobre todo en el centro y el norte de esta metrópoli de cuatro millones de habitantes.
