Ekaterina Nadolskaya dijo que el ex futbolista, invitado a la final de la Copa Confederaciones, la asedió en su habitación y le ofreció dinero en un confuso incidente.
Una periodista rusa denunció a Diego Maradona en San Petersburgo, asegurando que el ex futbolista tiró de su ropa y le ofreció dinero para tener relaciones con él, por lo que salió gritando de la habitación.
La joven, identificada como Ekaterina Nadolskaya, habría estado entrevistando al argentino, invitado por la FIFA para la final de la Copa Confederaciones.
Periodistas de la cadena Globo presenciaron cómo la joven salió del ascensor, con tres oficiales de seguridad, en la mañana del lunes. Posteriormente, dejó el hotel acompañada de un policía. A su vez, el hotel se negó a hacer declaraciones sobre el incidente y no indicaron si el director técnico permanecía alojado en el hotel, pero numerosos testigos confirmaron haberlo visto en el edificio.
El «10» habría conocido a Ekaterina en un restaurante, tras la final en la que Alemania venció a Chile. Incluso, la joven fue quien publicó una imagen del encuentro, afirmando que su intención era entrevistarlo. Sin embargo, no quedó claro si pasaron la noche juntos o si ella acudió al hotel en las primeras horas del lunes.
«Tuve una invitación a la habitación. Fui con un amigo. Unos minutos más tarde, mi amigo se fue y Maradona cerró la puerta. contestó preguntas primero y luego me empezó a molestar», repasó, en declaraciones a Life.ru. «Yo estaba en su habitación y simplemente llamó a la seguridad, me echó del sofá. No entendí qué paso», declaró la mujer en el hotel, según un video divulgado por Life en el que no se ve a Maradona. Además, indicó que recibió una oferta de 500 euros, sin aclarar los detalles.
Posteriormente, agregó: «Él intentó meterse conmigo. No pude llamar a la policía, la seguridad me sacó del cuarto. Me quedé con miedo», agregó. Nadolskaya indicó que no tuvo tiempo de retirar sus pertenencias de la habitación. «Pidan que me devuelva mis cosas», solicitó a los agentes.
También, aclaró que no planea iniciar acciones legales. «No quiero su dinero, ni una disculpa. Ya sufrí muchos nervios y no quiero oír hablar de él nunca más».
FUENTE: INFOBAE