Al ganar el Masters de Londres, el tenista escocés ratificó por qué desbancó a Novak Djokovic del número uno del ranking mundial.
Después de su victoria ante Novak Djokovic por 6-3 y 6-4 en la final del Masters de Londres, el escocés puede contarse con orgullo como parte de ese grupo de jugadores que alguna vez conquistaron el Torneo de Maestros y de esa elite aún más selecta de tenistas que consiguieron finalizar alguna temporada como número uno.
Trece años hacía que al final de la temporada, en lo más alto del ranking no aparecía el nombre de Djokovic, de Roger Federer o de Rafael Nadal.
“Este es un día muy especial y también inesperado. No pensé que podía llegar a ser número uno esta temporada”, afirmó el escocés, que se transformó en el 17° jugador de la historia en finalizar el año en lo más alto.