Marisa Graham: «Mi plan de trabajo plantea el hambre como primer tema»

Además, la flamante Defensora de Niñas, Niños y Adolescentes advirtió sobre el problema de la «malnutrición» al indicar que «uno de cada tres chicos ingresa a la primaria con sobrepeso en Argentina.


La flamante Defensora de Niñas, Niños y Adolescentes, Marisa Graham, señaló hoy que su «plan de trabajo plantea el hambre como primer tema» porque «es inconcebible que haya niños con hambre en Argentina», al tiempo que advirtió por los casos de «malnutrición» infantil.

El último viernes el Senado aprobó la designación de Graham en el cargo que fue creado hace 15 años y que se encontraba vacante desde entonces, y la abogada especializada en niñez adelantó que ya presentó un presupuesto así como el programa de trabajo que tiene previsto encarar.

«Mi plan de trabajo plantea el hambre como primer tema. No se puede pensar en una agenda de derechos humanos para niños si hay hambre. Es inconcebible que haya niños con hambre en Argentina», sostuvo la funcionaria en declaraciones a la AM750.

Al mismo tiempo, Graham advirtió sobre el problema de la «malnutrición», al indicar que «uno de cada tres chicos ingresa a la primaria con sobrepeso en Argentina, esto quiere decir que los niños sólo consumen carbohidratos y eso tiene que ver con que los papás y las mamás no pueden garantizar una dieta equilibrada».

«Cuando hay pobreza e indigencia los números suben en niños, niñas y adolescentes. Si hay un 40% en términos generales, en los chicos ese número supera el 50% por múltiples razones», señaló y agregó: «Hay cuestiones vinculadas a la pobreza, como la vivienda, que son fundamentales. A su vez, resolver el tema de la vivienda resuelve otros problemas, como acceso a la escuela».

Por otro lado, sostuvo que «la Defensoría tiene un presupuesto de 2018, otro de 2019» que según informó la Comisión Bicameral del Congreso que supervisa al organismo están disponibles, pero aclaró que «ahora se viene la pelea por el Presupuesto 2020», que ya fue planteado al Poder Ejecutivo.

«Tenemos la desventaja de que empezamos de cero pero la gran ventaja de que no tenemos un corset», agregó la funcionaria en referencia a la vacancia de su cargo desde que se creó, en 2005.

En otro orden se refirió a la «violencia contra los niños» como algo «cotidiano» y precisó: «Nos escandalizamos frente al abuso sexual infantil o cuando vemos un niño con tres costillas rotas, pero hay una violencia que está casi naturalizada, que es el castigo corporal. Esos pequeños castigos que tienen como objetivo ‘educar’ a los niños: el zamarreo, el mechoneo, o el insulto».

Fuente: NA

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