Un “entramado societario y bancario”, así lo definió la Unidad de Investigación Financiera (UIF) en el informe N° 0100/2016, documento pesado en la causa Los Sauces SA por la que Cristina Kirchner y sus hijos Florencia y Máximo serán indagados en los primeros días de marzo.
El juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Rívolo acusan a la ex familia presidencial por lavado de activos y cohecho. Los movimientos bancarios de la inmobiliaria incluyen desde transferencias «sin justificación» por $ 50 millones firmadas por el diputado nacional, depósitos en efectivo “sin sustento”, y extracciones por $ 3,9 millones sin «documentación respaldatoria», sostiene la UIF.
En primer lugar, el organismo antilavado afirma que hay una evolución de los movimientos de las cuentas que pertenecen a la inmobiliaria que fueron transferidos a las cuentas que Florencia Kirchner tiene en el Banco Galicia ( U$S 4.664.000 y U$S 1.032.144 y $ 53.280). “Previo paso por cuentas de otros socios y de la Sucesión Néstor Kirchner”. Respecto al hijo de Cristina, se indicó que realizó «la mayoría de las transferencias”.
Como administrador de Los Sauces SA y de la Sucesión NK, Máximo Kirchner realizó distintas transferencias emitidas y recibidas entre ellas, “sin justificación alguna”. De esto, seguramente, el diputado nacional deberá dar explicaciones ante el Juez.