El empresario fue autorizado a salir de prisión y viajar a Santa Cruz. Estuvo acompañado por sus hijos y su ex esposa. Volverá al penal de Ezeiza a primera hora del sábado.
Bajo un fuerte operativo de seguridad dispuesto por el Servicio Penitenciario Federal, Lázaro Báez despidió los restos de su madre este viernes. El empresario participó de la misa y posterior entierro de Floriana Rodríguez, quien falleció a los 89 años.
Llegó a Santa Cruz a las 1.50 de la madrugada y de allí fue trasladado hasta la unidad penitenciaria 15 de Río Gallegos. Alrededor de las 9 de la mañana, el ex dueño de Austral Construcciones fue trasladado hasta la sala velatoria de Ramps, en donde se encontró con sus hijos Leandro, Martín, Melina y Luciana, y su exesposa, Norma Calismonte.
Pasadas las 10 de la mañana, la custodia lo llevó hasta el cementerio municipal de la ciudad donde se llevó adelante la ceremonia religiosa de entierro que duró 40 minutos. Durante todo el operativo, un numeroso grupo de agentes custodió al empresario que no llevaba puestas las esposas.
Al término del oficio religioso, Báez regresó a la camioneta del Servicio Penitenciario y regresó a la UFI-15 hasta ser trasladado de nuevo a Buenos Aires. Según constató TN.com.ar, el empresario aterrizará de vuelta en la ciudad a primera hora del sábado.
