La política se pelea por incorporar en sus listas a la Iglesia Evangélica

Este nuevo actor social, comienza a tener influencia en el armado político de distintos espacios, debido al crecimiento de la comunidad evangélica.


El cierre de fórmulas y listas legislativas que tuvo lugar este último fin de semana, mostró la inserción paulatina de un nuevo actor social que comienza a tener influencia en el armado político de distintos espacios: la Iglesia Evangélica.

Integrantes de este culto religioso aparecen como candidatos en distintas fuerzas políticas y buscan tener un nuevo rol institucional. La comunidad evangélica abarca cerca del 11 % de la población, según la última encuesta realizada por Conicet junto a cuatro universidades nacionales, lo que representaría alrededor de 4,5 millones de personas.

Según informa TN, la inserción de dirigentes de origen evangélico en el cierre de listas incluyó a la exdiputada Cynthia Hotton, que forma parte del binomio presidencial de Juan José Gómez Centurión, del Frente Nos. En las recientes elecciones en Santa Fe, Amalia Granata fue secundada en la lista de candidatos a diputados provinciales por el pastor Walter Ghione y un poco más atrás por el evangélico Juan Domingo Argañaraz. Esa fuerza política cosechó unos 285 mil votos, por lo que consiguió hacer ingresar seis legisladores al parlamento santafesino.

En un informe del programa Periodismo Para Todos (PPT) que conduce Jorge Lanata, se pudo observar el rol espiritual y social que tiene la iglesia evangélica en la provincia de Buenos Aires y en Santa Fe. «Nuestra misión principal es predicar el evangelio. También hay una acción secundaria que es un rol social. En La Matanza el 10% de la población es cristiana evangélica participante», explicó Miguel Pereda, pastor de la Iglesia Centro Familiar Cristiano, en Isidro Casanova.

El Gobierno nacional y el bonaerense convocó a la comunidad evangélica para la asistencia social alimentaria en los barrios. «El Gobierno nos llama porque somos confiables», afirmó Pereda. Las iglesias evangélicas distribuyen 50 mil kilos de alimentos en barrios del Conurbano bonaerense más otros 6 mil kilos en Mar del Plata, mostró el informe de PPT.

También cumplen un rol social en las cárceles, en las cuales muchos prisioneros buscan la fe cristiana evangélica como forma de «reinserción» e, incluso, de arrepentimiento.

El caso de la provincia de Santa Fe, fue un caso testigo en el cual la periodista Amalia Granata, activista contra la legalización del aborto durante el debate parlamentario del año pasado, consiguió una banca en la legislatura santafesina tras hacer campaña junto a otros dos pastores, que también resultaron electos.

Finalmente el informe de PPT  contó que existen unos 750 templos evangélicos con unos 160 mil fieles. Los representantes del culto evangélico se despegan de la actividad proselitista tradicional. «Nuestro proselitismo es distinto, tiene que ver con nuestros principios cristianos. Nos han querido convencer de ser punteros en los barrios, y nos hemos rehusado», dijo el pastor Walter Ghione, diputado provincial electo.

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