Alertan sobre aplicaciones y dispositivos que podrían leer los chips de las boletas a escasa distancia.
El gobierno busca que el sistema de Boleta Única Electrónica (BUE), implementado en Salta y en la Ciudad el año pasado, sea obligatorio en todo el territorio nacional. Ayer, la iniciativa avanzó en el Congreso cuando la Cámara de Diputados giró al Senado el proyecto de Reforma Electoral, que incorpora el voto electrónico, entre otras innovaciones.
Lo que sorprendió desde Casa Rosada, fue el testimonio de un grupo de expertos informáticos alertando sobre la posibilidad de vulnerar el secreto de elección.
Magic Software Argentina (MSA), la empresa que desarrolló la Boleta Única Electrónica y la aplicó en varias elecciones en el país, aseguró que el sistema no presenta ningún riesgo para el secreto del voto.
«La BUE mantiene inalterables los valores del voto tradicional en papel, complementando sus virtudes con tecnología para fortalecer sus principales debilidades. El mismo mecanismo es el que brinda las garantías para que se respete la libre decisión del votante», explicaron sus creadores al diario La Nación.
Sin embargo, los expertos sostienen que durante ese proceso hay formas de violar el secreto del voto, modificarlo, e incluso destruirlo:
La violación del secreto puede lograrse:
A través de Aplicaciones del Celular: «El sistema de Boleta Electrónica incluye un chip, que se puede destruir, leer y modificar desde una distancia variable de 50 centímetros y posiblemente más. Cada chip está numerado. Por lo cual, si el presidente de mesa o el sistema logra identificar el número de chip que se le asigna a un votante, después puede identificar quién votó a quién. Ese número es inalterable, viene de fábrica»
A través de ondas electromagnéticas. «En Holanda en 2008, técnicos informáticos y hackers mostraron cómo, con un receptor de radio y pequeña computadora portátil, podían determinar a quién se estaba votando a una distancia de 25 metros. ¿Cómo? A través de las ondas electromagnéticas del sistema de votación, que son originadas en cualquier computadora».
A través del ruido eléctrico. «Con un software que genere un ruido eléctrico, en el puerto USB de una máquina se puede decodificar, desde otra máquina que esté a cinco metros de distancia, qué información se está transmitiendo. Esto es transmisión de información a través de vías no previstas y se aplica a cualquier sistema electrónico».
A través del almacenamiento de datos. «Otra forma es que de alguna manera el sistema almacene los votos que fueron emitidos. El proyecto del Ejecutivo exige que la máquina no pueda grabar datos. Pero el sistema que se usó en Buenos Aires y en Salta tenía un componente que permite tranquilamente almacenar todos los votos».