Por primera vez un presidente de EE.UU arriba en el país asiático. Buscan reencauzar la tensa relación entre ambas naciones.
La zona desmilitarizada entre las dos Coreas fue el punto de una reunión que marca un antes y un después entre Donald Trump y Kim Jong Un, quienes acordaron que “en cuestión de semanas” reanudarán las conversaciones entre ambos países sobre el desarme nuclear de Corea del Norte.
El encuentro duró unos 50 minutos y se desarrolló en la Casa de la Libertad de Panmunjom, la instalación dividida entre ambas naciones. Es la primera vez que un presidente norteamericano pisa suelo norcoreano.
Trump sostuvo que acordaron “crear equipos de negociadores” y que se prevé que en un plazo de dos a tres semanas empiecen a trabajar en torno al desarme nuclear en el país asiático, el cual que ayudaría a reencauzar la tensa relación bilateral que mantienen.
La cumbre se da tras la suspensión de las conversaciones sobre el desarme nuclear en la cumbre en Hanói (Vietnam) que ambos mantuvieron en febrero. “Desde entonces Corea del Norte no realizó pruebas nucleares ni ensayos con misiles de largo alcance”, destacó el magnate estadounidense.
En los últimos años, Corea del Norte sí realizó varias pruebas con proyectiles de corto alcance sobre el mar de Japón, que en opinión de los expertos se trató de un gesto de frustración por la paralización de las conversaciones en febrero.
“El presidente Trump acaba de cruzar la línea de demarcación. Se convirtió en el primer presidente de Estados Unidos que visita nuestro país, y veo este acto como una expresión de eliminar un desafortunado pasado para abrir un nuevo futuro”, declaró Kim a la prensa junto a Trump, quien lo invitó a Washington.
