Familiares de las adolescentes baleadas el sábado en la localidad bonaerense de Florencio Varela pidieron “que se haga justicia” por el ataque a un grupo de amigas que terminó con la vida de dos de ellas.
Las declaraciones fueron realizadas ayer tras el entierro de Sabrina Barrientos y Denis Juárez, de 15 y 17 años, que murieron tras ser baleadas a la salida de un boliche de avenida Calchaquí al 5200. El principal acusado es un vigilador de 36 años que según familiares de Juárez acosaba a la adolescente.
“Si el hombre que está detenido es el que disparó que pague con cárcel de por vida”, pidieron, desconsolados, los padres de Juárez. La chica había asistido al boliche Santa Diabla el viernes por la noche junto a otras tres amigas. Las otras dos también recibieron impactos de bala y una de ellas está internada el hospital Mi Pueblo en grave estado, con asistencia respiratoria mecánica.
“Pedimos que se haga justicia, nada más, era una nena”, reclamó su madre a una guardia periodística apostada en las cercanías de la casa velatoria. El abogado Sergio Contreras, que representa a los familiares, remarcó que “si este hombre era conocido de las cuatro víctimas y si llega a ser esta persona (el autor del ataque) sería un caso de homicidio criminis causa porque trató de eliminar a todas para que nadie lo apunte”.
