El cerebro de la banda internacional que guardó 12 valijas con cocaína en un anexo de la embajada rusa en Buenos Aires, las trasladó a Moscú por el servicio de correo diplomático y cayó luego en un operativo de película, fue detenido en las últimas horas en Alemania. Ya son seis los apresados en el marco del operativo «12 reinas».
Se trata de «el misterioso señor K», identificado como Andréi Kovaluch, un empresario de nacionalidad rusa y apellido ucraniano con base en Hamburgo, Alemania, a quien se lo acusa de ser el planificador y financista de la red criminal, aunque al momento y antes de ser capturado se declaró como «inocente» y apuntó a que la policía le atribuyó «pruebas falsas».
«Compré en total 270 kilos de café, que por supuesto luego intenté vender. Por recomendación de mi gran amigo Nikolai Shelepov, un oficial de seguridad de la embajada rusa en Argentina, fui a Uruguay y compré algunas figuras de una materia prima local. (…) Son costosas, pero en Buenos Aires estaban tres o veces más caras. Pensé que podría hacer buen dinero con ellas», relató Kovalchuk en una entrevista telefónica con el sitio ruso Kommersant.
La información fue confirmada por el abogado del detenido, Vladímir Zherebenkov, quien aseguró: «Su esposa me llamó y dijo que Kovalchuk fue detenido en el marco de una investigación penal sobre drogas». Además, informó que las autoridades alemanas van a estudia su extradición.
A través de su representante legal, Kovalchuk se había declarado víctima de una «provocación» por parte de los órganos de seguridad argentinos en conjunto con los servicios secretos de Estados Unidos para desprestigiar la labor de la misión diplomática rusa.
Según registros migratorios, el aprehendido había viajado a la Argentina varias veces en los últimos años, movimientos que fueron vigilados por Gendarmería y seguidos por cámaras. Fue identificado gracias a la intervención de su teléfono y a que se comunicaa de forma frecuente con Blizniouk, línea que fue escuchada tras el hallazgo de la droga en la embajada.
En diciembre de 2016, el embajador de Rusia en la Argentina, Victor Koronelli, denunció ante la Justicia el entramado de una red de narcotráfico dentro de la sede diplomática. Durante un año, efectivos de la Unidad de Operaciones Antidrogas de Gendarmería investigó a la red y logró dar con la detención de cinco funcionarios diplomáticos y con un policía de la Ciudad.
Además, secuestró 389 kilos de cocaína distribuidos en 360 paquetes dentro de 12 valijas que se encontraban en la escuela de la Embajada en el país, lo que totalizan un cargamento valuado en 50 millones de euros.
